Por Felicia Osorio
En julio de 2023, salió a la luz pública la denuncia de familiares de las víctimas de un trágico accidente de tránsito ocurrido en la autopista del sector El Guayabo, a la altura de la empresa Ebenezer, en Yaracuy, Venezuela.
El principal sospechoso del incidente, el ciudadano venezolano de ascendencia árabe Ammar Mansour Saleh, continúa en libertad, pese a las investigaciones realizadas por el Ministerio Público de Venezuela para lograr su captura. El siniestro, causado por el exceso de velocidad de Mansour, resultó en la colisión de su vehículo contra la parte trasera de otro automóvil donde viajaba una familia.
El impacto causó la muerte de Enrique Galíndez Oropeza, Dilsaidy Rivero Montero y María Figueredo, dejando además heridos a Luis Oropeza (padre de los menores), L.L. (de 9 años) y L.O. (de 4 años).
Los fallecidos eran tíos y la madre de los menores, quienes sufrieron fracturas y lesiones graves, aunque a mediados de 2023 se reportaron estables.
Vehículo involucrado en el accidente bajo resguardo judicial: Acusan a Mansour Saleh de homicidio culposo
En el lugar de los hechos, se identificó el vehículo conducido por Ammar Mansour Saleh como una camioneta Toyota, modelo LC300, color blanco, con placas AB852OT, la cual fue posteriormente solicitada por las autoridades tras el accidente. Mansour Saleh enfrenta acusaciones por homicidio culposo debido a su presunta responsabilidad en el trágico suceso que cobró la vida de tres personas.
Las familias de las víctimas han instado repetidamente a las autoridades del Ministerio Público venezolano a que capturen a Ammar Mansour Saleh para que responda ante la justicia por los cargos que se le imputan.
Hasta la fecha, la justicia venezolana no ha logrado aprehender al sospechoso, lo que genera frustración y angustia entre los allegados de los fallecidos y heridos en el accidente.
Vida de lujos y evasión: Ammar Mansour Saleh divide su tiempo entre Estados Unidos y Panamá
A pesar de las acusaciones en su contra, Ammar Mansour Saleh sigue disfrutando de una vida de lujos, moviéndose libremente entre Estados Unidos -particularmente Miami- y Panamá, evadiendo así el proceso judicial en Venezuela.
El sospechoso proviene de una prominente familia de empresarios de origen árabe establecidos en Valencia, estado Carabobo, Venezuela, cuyo negocio principal es la importación de electrodomésticos desde Asia y su distribución al mayor.
La familia Mansour es ampliamente reconocida por ser propietaria de diversas marcas de electrodomésticos, destacando entre ellas Gplus, con más de veinte años de trayectoria en el mercado, siendo considerada una marca insignia del grupo empresarial.
Gplus comercializa una amplia gama de productos, incluyendo aires acondicionados, refrigeradores, lavadoras, licuadoras, cocinas, televisores, dispensadores de agua y fabricadores de hielo, consolidándose como una marca de referencia en el sector.
Fundada en 2002, Gplus inició operaciones en Venezuela y, para 2009, estableció un centro de distribución en la Zona Libre de Colón, Panamá. En 2014, la marca amplió su presencia a otros mercados en Centroamérica, Suramérica y el Caribe. Venezuela, Panamá y Nicaragua constituyen los principales mercados de Gplus, con planes de consolidación en República Dominicana, Colombia, El Salvador, Honduras y Guatemala.
Ammar Mansour Saleh ha utilizado la supuesta necesidad de atender los negocios familiares en Panamá, donde opera la empresa G Sonic, S.A. y otras compañías del grupo, como pretexto para evadir la justicia venezolana.
Esa estrategia ha dificultado que las autoridades venezolanas logren su aprehensión, permitiéndole continuar con sus actividades empresariales mientras enfrenta acusaciones por homicidio culposo en Venezuela.
Llamado a la cooperación internacional: Solicitan investigar posible evasión fiscal de la familia Mansour
Diversas fuentes cercanas al caso coinciden en la urgencia de alertar a las autoridades panameñas y estadounidenses sobre la situación legal de Ammar Mansour Saleh en Venezuela. Además, se insta a investigar fundadas sospechas de posible evasión fiscal mediante transacciones entre empresas vinculadas a la familia Mansour, gestionadas desde Panamá por diferentes miembros del clan.
Mientras tanto, Ammar Mansour Saleh mantiene una relación sentimental con la empresaria Carmen Mercedes Hernández Marchena, conocida en Carabobo como entrenadora de misses en concursos de belleza, jurado del Miss Carabobo y propietaria de la franquicia EMS Revolution. Esta empresa, con sede en el Centro Comercial Concepto La Viña en Valencia, funciona como gimnasio y centro de fitness especializado en entrenamiento con electroestimulación muscular, ofreciendo también servicios de spa de belleza y venta de equipos.
Aunque se rumora sobre otros romances paralelos de Mansour Saleh, su relación con Hernández Marchena es la más pública y reconocida en el ámbito social de Valencia.
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