En 2017 el Sistema de Procura de Órganos y Tejidos fue suspendido. Desde esa fecha, muchos niños han muerto esperando un trasplante, una realidad que al día de hoy se mantiene, pese a que el Gobierno de Maduro destaca las mejoras en la economía.
Katherine Martínez, directora de Prepara Familia, indicó que no existen estadísticas claras sobre los pacientes en espera, sin embargo, calcula que unos 7 mil enfermos renales que están recibiendo diálisis.
«De esta cifra, 40 % requiere trasplante y de ese grupo, 10 % pueden ser niños», comentó en una entrevista ofrecida al circuito Éxitos de Unión Radio.
Actualmente la única posibilidad de hacer un trasplante es de «vivo a vivo», pero eso reduce el número de candidatos al tratamiento.
«El que necesitamos es de cadáver a vivo y por el momento no vemos luces en el túnel porque habría que hacer una gran inversión en el sistema de salud para que responda a las expectativas que se tienen. Debemos tener ambulancias, ascensores, equipos, insumos, tenemos personal preparado, pese a la migración, inmunosupresores».
Lucila Velutini, integrante de la Organización Nacional de Trasplantes de Venezuela argumentó que reactivar el sistema va más allá de hacer la intervención quirúrgica, pues se necesita una plataforma de salud que garantice estudios, equipos y medicamentos que hagan viable el trasplante.
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