Maduro sostuvo que es una “batalla” por lo que pidió “equilibrar” el mercado.
“Quién puede más, el dólar de guerra o la construcción de un dólar de mercado que beneficie la estabilidad económica, el crecimiento, la producción, el comercio y la satisfacción de las necesidades de un país, hagamos la reflexión”, añadió.
Maduro indicó que se “sobrecalentó” el comercio venezolano y “hubo un 40 % más de demanda de divisas, pero de todas maneras, el dólar de mercado, el sistema cambiario que se ha construido entre todos, funcionó”.
Recordó que en octubre pasado “reapareció” el dólar paralelo, que calificó de “viejo enemigo de la economía venezolana”.
“Tenemos que hacer todo lo que haya que hacer para superar la perturbación que han creado los dos anuncios de guerra económica del Gobierno de los Estados Unidos contra Venezuela”, dijo Maduro en relación al fin de la licencia de Chevron para operar en el país, así como la imposición de un arancel del 25 % a aquellos países que compren petróleo de la nación caribeña.
El dólar paralelo cerró la jornada en 101,59 bolívares, unos 32,03 bolívares por encima del oficial, que los comercios del país, por órdenes del Ejecutivo, deben usar como referencia para calcular pagos de bienes y servicios, mayoritariamente fijados en la divisa estadounidense, adoptada como consecuencia de la hiperinflación que vivió el país durante cuatro años, hasta 2021.
En 2024, el bolívar se devaluó un 30,9 % respecto al dólar, cuyo precio en el mercado oficial pasó de 35,9 bolívares a 52,02 durante el año, sobre todo, en el último trimestre, cuando se rompió la estabilidad que mantuvo desde enero hasta octubre, período durante el que osciló entre los 36 y 37 bolívares. (I)