Agentes federales de inmigración se unieron a la policía de Nueva York el jueves en un edificio de apartamentos del Bronx tomado por inmigrantes ilegales, pocos días después de que un migrante venezolano supuestamente matara a tiros a dos inquilinos.
El edificio Fordham Heights, que alguna vez fue un refugio, ha estado plagado de tensiones latentes entre los inquilinos a largo plazo y una turba de inmigrantes que se apoderaron de partes del edificio este año, y la carne provocó un derramamiento de sangre con el tiroteo fatal del 24 de mayo, según fuentes. y dijeron los residentes.
La policía ahora está buscando al migrante venezolano Josué Rubén Silva, de 21 años, quien ha acumulado un historial preocupante este año después de cruzar ilegalmente a Estados Unidos el año pasado, dijeron las fuentes.
“Tengo miedo”, dijo al Post un residente de 27 años. “No me acerco a su lado [del edificio]. Les tengo miedo. Me voy de aquí. Este no es un ambiente para criar a un niño”.
“Tienen un arma en el edificio”, añadió. “Nadie se esperaba eso. También podrían haber disparado y matado a otras personas en el edificio. Tienes armas en el edificio con niños, gente yendo y viniendo. Eso no es seguro”.
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